lunes, 3 de agosto de 2009

Una imagen, una historia

Hace unas semanas vi que welzen había organizado en su blog un concurso de relatos bajo el lema "Una imagen, una historia" y la foto me gustó tanto, que me decidí a participar y mandarle algo. Hacía mucho tiempo que no escribía nada, pero la historia salió sola, casi sin pretenderlo, así que fue una vuelta a mis "orígenes" de lo más sorprendente.


Y aquí os lo dejo, no es nada del otro mundo, pero le he cogido mucho cariño.


"Ella siempre había tenido una imaginación desbordante. Cuando no le gustaba su vida, se inventaba otra durante un rato y vivía en ella, era su válvula de escape, su forma de convencerse de que era alguien, que no sólo pasaba por aquí, que lo suyo, por mucho que el mundo se empeñara en lo contrario, iba a dejar huella. Porque ella quería que le pasaran cosas, lo que fuera, pero que pasara algo en su anodina vida, algo que le hiciera sentirse viva. Por eso creaba su mundo, su película, y ahí, ella era la protagonista.

Él había llegado a la estación con una hora de antelación, le gustaba ser previsor, su metódica rutina era lo único que le confería tranquilidad, que le amarraba a la estabilidad que tanto valoraba, en un mundo que cada vez se volvía más loco. Mientras esperaba, repasaba mentalmente las tareas pendientes y se regocijaba en la seguridad que le daba tener su mundo controlado, sin sobresaltos. Su mundo perfecto.

Él la vio salir al andén y se fijó en la chica despistada que miraba los carteles como si no supiera donde estaba, con un cierto aire de desprotección, que hacía que le dieran ganas de tomarla entre sus brazos y decirle que estaba a salvo, que nada malo podía pasarle.

Ella le vio nada más pisar el andén, un chico alto, con un toque desgarbado, pero que trasmitía tranquilidad, confianza, de los que te toman entre sus brazos y te hacen sentir que estás a salvo y que nada malo puede pasarte. Y ahí empezó su película.

Ella se imaginó que él se le acercaba con una frase banal, quizás del tipo “Perdona, ¿sabes si el tren de las 15:30 lleva retraso?” o quizás con una frase impactante, de las de “Te he estado esperando toda mi vida”. Ella le miraría entre asombrada y divertida y encontraría alguna respuesta a ingeniosa a lo que fuera que él le hubiera dicho, entonces se sentarían en un banco del andén y hablarían durante horas, dejando pasar los trenes, igual que pasa la vida, pero no les importaría, porque ellos no dejarían escapar el suyo, el de su historia, y se haría de noche, pero la oscuridad nunca llegaría al andén, y él la miraría y se perdería en sus ojos verdes, y ella pensaría que la luz de las farolas le hacía parecer un hombre misterioso, y se besarían y…

Él, por su parte, no podía dejar de mirar a la chica morena de la mirada perdida en el horizonte. Había algo de ella que le atraía irremisiblemente, incluso llegó a pensar que podía acercarse y decirle algo, quizás una frase banal, o una frase impactante, aunque era una locura. Seguro que ella ni se había fijado en él, de hecho, ni le había mirado, y seguro que pensaría que es un loco, lanzándose a hablar con chicas desconocidas en medio de un andén. De hecho, no entendía ni cómo se le había pasado por la cabeza que algo así podría ocurrir, algo tan impropio de él…

Un tren que no era el de ella llegó a la estación y él subió. Ella se sintió apenada, por la oportunidad que había dejado pasar. Aunque, en el fondo de su corazón sabía que era imposible que él hubiera dicho nada, probablemente ni siquiera había reparado en ella. Porque, al fin y al cabo, se dijo, esas cosas sólo pasaban en las películas."

Ya está la foto del concurso del mes de agosto, así que si os animáis, podéis participar AQUÍ.

4 comentarios:

Max dijo...

Me gusta tu relato, pero a los protagonistas de tu historia les diría que a veces la vida supera las películas.

Una vez escribí un relato muy parecido (te lo enseñaría pero es en catalán y no entenderías nada xD). La trama era casi igual pero la acción no se desarrollaba en una estación de tren.

A ver si algún día me animo a participar (ya he visto mucha gente haciéndolo).

Un beso :)

marijose dijo...

Jo, Max, qué pena no saber catalán porque me encantaría leerlo. Hombre, así por encima creo que la idea la pillaría pero claro, me perdería muchos matices...

Y sí, tienes razón en que a veces (más de las que pensamos) la vida supera a las películas, lo que pasa es que la gente no termina de creérselo, y ése es el problema ;-)

Eva RF dijo...

Lo que más me ha gustado es el primer parrafo, la descripción de ella.
Creo que todos tenemos algo en común con esa chica!

Un besin!

marijose dijo...

Pues sí, Eva, tienes razón en lo que dices... lo de fantasear y soñar despiertos es algo que hacemos todos en algún momento.

De hecho, es un tema que últimamente está muy de moda por el foro no? jejejeje ;-)

Besos guapa!