Tarta de frutos del bosque

Aquí os traigo una tarta que a mí personalmente me parece ideal para el invierno. Hace bastante tiempo que no la hago (las fotos son del año pasado), pero creo que pronto volveré a repetirla porque a D. le encanta y ya me la está reclamando. Además, a mí este tipo de tartas me apasionan, porque son muy "perfect american housewife" y una tiene su lado Bree Van de Kamp, que con estas cosas se muestra en todo su esplendor.

Así que cuando vi la receta en este blog, no me lo pensé dos veces y, después de adaptarla a mis gustos, éste ha sido el resultado: un "pie" de frutos del bosque que está buenísimo tanto templado como frío y totalmente adictivo. La masa es fácil de hacer, y supongo que con cualquier otro tipo de relleno también quedaría bien, pero me quedo con la mezcla de frutas rojas, que son mi debilidad.

INGREDIENTES:

Para la masa:

- 230 gr de harina
- Una cucharadita de levadura en polvo.
- 60g de almendras molidas
- 100g de azúcar
- 115g de mantequilla fría en taquitos
- 1 huevo
- 1 yema de huevo

Para el relleno:

- 350 gr de frutos rojos. Yo usé frambuesas y arándanos, de los congelados.
- 1 cucharada sopera de maicena
- 2 cucharaditas de azúcar


PREPARACIÓN:

En primer lugar, preparamos la masa. Para ello, mezclamos en un bol la harina, la levadura en polvo, las almendras, la canela y el azúcar. Luego, añadimos la mantequilla a trocitos e integramos todo. Lo más fácil es usar las manos (bien limpias).

Se añade el huevo y la yema y trabajamos con las manos hasta conseguir una masa suave. Cubrir con un trapo y lo metemos en el frigorífico una meda hora, para que se ponga firme.

Sacamos la masa del frigo y la extendemos con un rodillo sobre una superficie enharinada hasta que quede un círculo lo suficientemente grande como para cubrir el molde y las paredes.

Ponemos la masa en el molde y retiramos los moldes sobrantes, que usaremos para hacer las tiras superiores. Dejamos enfriar el molde y la masa sobrante en el frigorífico unos 15 minutos.

Cuando casi haya pasado el cuarto de hora, aprovechamos para preparar el relleno. Para ello, ponemos en un bol las frambuesas y los arándanos y lo mezclamos con la maicena y el azúcar, con cuidado. Se quedarán con una capa blanca, pero no pasa nada, porque luego en al hornear desaparece por completo.

Vertemos el relleno en el molde y, con la masa que nos ha sobrado, hacemos las tiras de decoración por encima y metemos en el horno precalentado a 190º unos 30 minutos.

Como veis, es bastante sencillo, y el resultado merece muchísimo la pena. Esta última foto es de la primera vez que la hice, os la he puesto para que la veáis por dentro, aunque me salió bastante regular en lo que se refiere a presentación, en comparación con la segunda vez, pero por lo menos os hacéis una idea de cómo queda con toda la fruta por dentro, y la especie de jarabe de frutos rojos que suelta... es delicioso.


Nunca lo he probado, pero supongo que esta tarta templada y con una bola de helado tiene que ser una locura... Y no sé vosotros pero yo, por mi parte, lo tengo claro: en cuanto vuelva a mi casa después de Navidades esta tarta cae sin ninguna duda así que... ¡¡¡estáis invitados!!! xDDD

Por fin!!!

Ya es oficial. Desde hoy, hasta el 1 de enero... ¡¡¡¡¡ESTOY DE VACACIONES!!!!!

Tenía tantas ganas de que llegara este momento, que creo que voy a llorar de la emoción (los que me conocéis sabéis que no exagero). Hacía ya un año que no tenía unas vacaciones en condiciones (lo de Septiembre fue un simulacro que tampoco me sirvió de mucho), y después del verano que pasé, de mi adicción al Nestea y de estos últimos meses de descontrol, hoy, por fin, lo pongo todo en "stand by" y me puedo olvidar durante unos días del agobio.

No pienso acercarme a un Código ni aunque me vaya la vida en ello. Os aviso, el que me hable de leyes sufrirá una muerte lenta y dolorosa (y el que avisa no es traidor, es avisador xDDD), como alguien me hable de artículos, de modificaciones o de actualizaciones, caerá fulminado por mi odio. No quiero saber nada de matrimonios, divorcios, herencias, contratos, sociedades, títulos-valores, hipotecas, bienes inmuebles ni la madre que los trajo, por muy relevante que pueda ser. Hasta el 1 de enero, he olvidado todos mis conocimientos y mi interés sobre el mundo jurídico.

Voy a ver mis series retrasadas, intentar escribir un poquito más en el blog, leer un par de libros que tengo pendientes y, sobre todo, voy a aburrirme. Aburrirme de no hacer nada, que es el mejor aburrimiento que hay en el mundo. Y me voy a permitir el lujo de no ponerme el despertador ni un sólo día. Creo que me lo he ganado, después de 7 días de pseudo-vacaciones (más bien de "rehab" xDDD) en todo el año, no es para menos.

Hoy tengo vacaciones, y estoy feliz.

Bienvenidos al Upper East Side

Una serie que me encanta (y que es muy polémica) es Gossip Girl. La superficialidad elevada a la máxima potencia y llevada hasta extremos surrealistas. Y yo soy feliz de la vida con cosas así, porque hay momentos en los que no estamos para dramas sesudos, en los que lo único que te apetece es sentarte delante de la tele y ver esas historias banales con ropa bonita y marujeos varios (o, como dice la madre de una amiga: "A mí dadme cosas de amor y lujo" xDDD).

Y Gossip Girl cumple (o cumplía) a la perfección con ello: enredos amorosos, derroche de dinero, traiciones, secretos... y por eso llegó y arrasó en su primera temporada. El problema vino al final de la segunda (en la que hubo capítulos muy irregulares, sobre todo el del flashback por el spin-off, que fue infumable) y, sobre todo, con el principio de la tercera. Y ahí fue donde empezaron las críticas, se le acusó de aburrida, de habe perdido el encanto, de no llevar a ninguna parte... (si queréis más info, en Brendamola escribieron explicando por qué dejaban la serie y dieron de pleno). Pero a mí hoy me gustaría defender a los chicos del Upper East Side, porque tienen un rinconcito en mi corazón y qué menos que dedicarles un post por todos los buenos momentos que nos han dado.

En mi opinión, el problema del presunto declive de Gossip Girl fue que perdieron el norte y pretendieron ser más de lo que son. Yo lo llamo, "la diferencia entre tomarse o no en serio una serie". Por supuesto, no te puedes tomar una serie en serio en el estricto sentido de la palabra, porque es una ficción, pero me refiero a la intención de los guionistas y creadores y, en consecuencia, las expectativas del espectador.


Me explico: cuando una serie se toma en serio, los guionistas se esfuerzan por crear cohesión en los personajes, en sus acciones, sus motivaciones, su interacción con los demás, el ritmo de la serie, su evolución... en fin, una coherencia que el espectador exige y que, si falla, hace que la serie se desmorone (pasa, por ejemplo, en Weeds o en Friday Night Lights). Sin embargo, en el caso contrario, los guionistas pueden ser salvajes, incurrir en ciertas contradicciones o hacer que sus personajes hagan cosas que no nos parecerían "normales", sólo en aras del entretenimiento y el espectador no pondrá cara de póker si ve este tipo de cosas porque lo importante es mantener la intensidad de la serie (el caso de Glee, sin ir más lejos, es una muestra estupenda).

Pues bien, el problema de Gossip Girl, en mi opinión, empezó cuando dejaron de crear tramas alocadas, con capítulos que te hacían aplaudir de la emoción y preguntarte qué se tomarían los guionistas al escribir esas ideas y decidieron empezar a ser una serie "respetable", a intentar que los personajes no tuvieran tantos sobresaltos y actuaran de una forma más coherente. Y ahí se les cayó el tinglado.

Porque yo, acostumbrada a frases tales como "Serena, lo has conseguido, mi padre me ha echado de casa y me vuelvo a vivir a mi suite" (grande, Chuck, ahora y siempre) o "You can tell Jesus that the bitch is back" (ese momentazo de Georgina será mítico forever and ever); a situaciones tales como aquella en la que Serena se va de viaje con Poppy y su novio a Barcelona y cuando vuelve no sabe si está casada o no, o a Queen B. siendo mala malísima e imponiendo su dominio en el Upper East Side con traicines, conspiraciones alocadas y secretos; me resulta complicado (y me da penita, la verdad), ver como ahora resulta que el soseras de Dan sigue siendo igual de soseras pero inexplicablemente liga con todo lo que se le ponga por delante o como Georgina desaparece sin dar mucha guerra y la lía sólo lo justo, o que Serena tenga esas profundas crisis vitales mientras pasea palmito y piernas kilométricas por todo Manhattan.

Así, la emoción se pierde, porque no pasa nada. Y lo que pasa, o es irrelevante, o se resuelve sin emoción ninguna y se queda en un quiero y no puedo. Y eso, en una serie que a priori tiene tantas posibilidades y podría ser tan divertida, es una lástima.


Pero hay luz al final del túnel. No sé si porque los creadores se dieron cuenta de que no iban por el camino correcto y dieron un giro, o si porque realmente pretendían llegar a ello desde el principio y nos tenían despistados, pero los tres últimos capítulos emitidos antes del parón navideño han supuesto una vuelta a los orígenes que, aunque no está a la altura de las mejores tramas de la serie, supone un soplo de aire fresco y una esperanza de mejora a la que yo me he aferrado sin dudarlo.

Sin ir más lejos, la cena de Acción de Gracias en casa de los Van der Woodsen del capítulo 11, recupera esos enredos cruzados con traiciones, mentiras y secretos, que tan buen resultado les ha dado otras veces y que esta vez tampoco decepcionan. Por eso creo que Gossip Girl se encuentra en la situación de poder volver a las buenas costumbres de superficialidad e intrascendencia que le caracterizan, y espero que aprovechen la oportunidad porque las tramas que han dejado abiertas son muy jugosas y pueden darnos mucho juego y alegrá.

Por mi parte, espero ansiosa el regreso con la seguridad de que lo malo ya ha pasado y que a partir de ahora volveremos a los cotilleos, a las conspiraciones y a las traiciones vestidas de Marc Jacobs que tanto nos gustan, así que...

Bievenidos al Upper East Side. Bienvenidos a Gossip Girl.

P.D.: I., que tiene mucho ojo, opina que el bajón de la serie coincidió justamente con la incorporación de Hillary Duff y que no terminó hasta que se fue. Es otra teoría que yo, personalmente, compro sin dudarlo xDDDD.

¿Y si cae aquí?

Resulta que Polilla, (que por lo que estoy viendo, viene a ser un clon mío que vive en Barcelona xDDDD) me ha compartido una partipación en un décimo de lotería para el sorteo de Navidad, y me ha dado una alegría, porque este año no tenía nada de nada para el sorteo, y así ahora por lo menos tengo la esperanza de que me toque algo.

Teniendo en cuenta todo el mundo que participa, ya nos puede tocar el Gordo para pillar algo, pero mira, yo con que me dé para invitaros a unas cervezas, me doy por satisfecha (bueno... y para comprarme unos zapatitos... ya que estoy pidiendo... jejeje). Así que cruzad los dedos, que os jugáis unas cañas!!!!

Además, como soy muy generosa, comparto el décimo con cinco personas (en realidad es porque es parte de las reglas de este asunto, pero no se lo digáis a nadie!). And the winners are... tachán, tachán...

Clark Kent
Mirichi
Brendamola
Rccpr
Martín

¡¡¡¡Mucha suerte, chicos!!!

El mago de las cosas pequeñas

El sábado confirmé algo que ya sabía: Luis Piedrahita es genial. Y no hay más que hablar. Como cómico, siempre me ha gustado muchísimo (desde que participó en un concurso de monólogos, hace años) y le he visto varias veces haciendo sus monólogos, tengo un par de libros suyos, fui al cine a ver su peli, leo su blog... en fin, que ahora que lo pienso puede decirse que soy "fans" jejejeje.

Pero nunca lo había visto haciendo magia en directo. Hasta el sábado, que me di cuenta de lo que me había perdido hasta ahora. Fuimos a un espectáculo suyo en La escalera de Jacob (sitio que me gustó mucho, por cierto, aunque un poco agobiante por tanta gente) y lo disfruté desde el primer segundo hasta el último. Lo mejor de todo es que el sitio era muy pequeñito (apenas unas 50 personas) y además nos pudimos sentar en primera fila. Que hagan magia a menos de un metro y medio de ti, es todo un privilegio y te deja aún más sorprendido, estábamos todos con la boca abierta, lo único que se oía era "¡ah! ¡ooooh!" y las risas que Luis arrancaba al público al mezclar cosillas de sus monólogos con la magia. Algunos de los "chistes" los había escuchado ya, pero no importa, porque son tan buenos que te sigues riendo y porque Luis tiene un "algo", que te trasmite el buen humor y no puedes evitar soltar la carcajada cada vez que suelta una de sus ocurrencias (creo que lo llaman talento, y eso él lo tiene de sobra).

Es impresionante ver como hay gente capaz de seguir ilusionándonos a estas alturas con cosas tan aparentemente sencillas, yo estaba embobada, como los niños pequeños que todo les sorprende y se quedan maravillados cualquier cosa... fue genial. De hecho, aún hoy sigo entusiasmada de lo bien que lo pasé y lo mucho que me gustó y, desde luego, pienso repetir.

Eso sí, con poquita gente, como el otro día, que es como mejor se ve. Y os lo recomiendo a todos los que tengáis ganas de pasar un buen rato, de ilusionaros, de veros envueltos por la magia y de dejar que os sorprendan. Siempre han dicho que Luis era el rey de las cosas pequeñas, pero yo creo que también es un mago de las cosas pequeñas y que lo demuestra en cada actuación.

P.D.: Voy hasta arriba, y necesito unas vacaciones YA!!!. Tengo pendientes varias cosas que contaros, pero no doy de mí: la crónica del concierto de Pereza (I., no me olvido), un par de recetillas que aún no he puesto, un post sobre Gossip Girl, que parece que mejora... y ¡¡¡mañana es el concierto de Sabina!!! Ainsss, ¡que estrés! xDDD

Tus sales (mis sales)

Una, que tiene mucho morro, va y le lanza un guante a una persona con un corazón que no le cabe en el pecho (y mira que es grande) y esa persona va y lo recoge (aunque, siendo argentino, debería decir más bien que lo agarra, no vaya a ser que tengamos malentendidos xD), y va y me escribe esto, que a muchos les puede sonar a chino pero que a mí, me ha encantado.

Te encontré en aquella esquina
salimos disparados hacia la cita
la siesta estaba servida con comidas y bebidas
todo libre por ella, para nosotros

Sin números, sin historia
sin pasados sin presentes
algunos regalos y nuestros ojos así
perdidos en la puerta de la entrada
***
Algunas fotos, romper el hielo
poner algunas rodajas de limón
tu historia y el tiempo y toda la información
los minutos y esa espera interminable

Compañera de emociones
mensajera incansable, positiva, necesaria,
personal, las gafas solo aumentan la visión
de una sagáz mujer dispuesta siempre a viajar

Con una receta te cocina el corazón
te lo sirve y con solo el aroma
sabes que tienes, como Agua para Chocolate
te lo envuelve te lo llevas

Ella se hizo presente
y todos nos olvidamos de nuestras vidas
solo importaba que esos ojos te miraran
y entonces fuimos testigos de la danza de los dioses

Inmortalizamos el momento
buscamos explicaciones en su gente
pero nadie podía definirla exactamente
nadie pudo abrazarla como se precisaba

Nos vimos en una fila
en otro momento histórico
tu ibas con él, era él?
yo iba con un amigo, no quise molestarte

Seguro que cantamos lo mismo
el recinto se puso hirviendo
como el agua cuándo está en su punto máximo
y necesitas echarle los ingredientes

Nos encontramos tantas veces
escuchando el mismo programa de radio
enviando mensajes del mismo tema
proponiendo sonrisas y lágrimas por doquier

Tus sales y ese toque de pimienta
tus sales y yo entro, no hemos coincidido esta vez
tus entradas y mis primeros platos
que deparará el postre, que será de mañana

Solo tu entenderás estas palabras
espero que aquel, no se ponga celoso
y yo no tengo para regalarte ni zapatos
ni tampoco la última de Tim Burton

Solo quiero saludarte
porque así lo has pedido
y que quede reflejado
en estos escritos

Que no me arrepiento y hasta agradezco
que fueras tú y no otra quién entró allí conmigo
en un mediodia perdido del centro madrileño...
y ahora recuerdo otro fugaz encuentro...

en día laboral, en pleno Corte Inglés
comprabamos lo mismo y nos reímos
preguntamos algo y nos fuimos
cosas raras del destino que construimos

un club del que nunca seríamos parte
una luz que espero nunca se apague
tus ocupaciones y tus comidas
que saboreo entre mis poemas

no quiero molestarte y ni tampoco olvidarte
algo se rompió para que dejaras de escribir dónde antes
algo sientes que se ha perdido para no leerte tanto
tengo gente que presentarte,

de Barcelona, de Madrid, de todas partes
la música volverá a unirnos alguno de estos días
y no será Michael Jackson o Marilyn Manson
será la chica del Mundo Maravilloso que sabe cantarnos

a fuego lento nos veremos por ahí
nos leemos siempre y comeremos perdices
si entra en tus recetas o me invita el del restaurante
sin fechas, sin números, sin prisas, a fuego lento

Te cortarán el pelo, te obligarán a cosas
que quieran volverte loca o dejarte de bajón
pero recuerda que tu nunca dejas de levantarte y
que tus sueños puden más que ninguna de las realidades

Te espero haciendo alguna fila de espera
entre clientes de un sentimiento que regalen
en las cocinas de opiniones y verdades
cuándo todas las luces se apaguen y empiece el gran show

Tendremos otra excusa
otra coincidencia y otro hilo en esta tela
tal vez tengamos que repetir la escena del principio
y sacarnos una foto los tres,

Dónde ella siga en el centro y nosotros de satélites
que disfrutan de ese planeta de otra galaxia
dónde compran entradas para ver sus rayos
sus eclipses, sus sombras y sus paisajes

Así volveremos al principio
dónde tú esperas por cualquier esquina
y yo pase a buscarte para juntarnos
entre las barras libres de la emoción incontrolable

Ya se verá que viene
Ya tendremos algun chuche que saborear
y con esto cumplo mi parte
el Tiramisú te toca a vos


(para Marijose)

Pues miles de gracias. Y saca la lista, porque por lo pronto te debo un tiramisú (aunque suponga que hagas un paréntesis en la dieta), una foto con Ella y un mojito durante algún concierto suyo. Y te aviso: no voy a parar hasta saldar la deuda xDDD.

Mi tiramisú

Recetas de tiramisú hay miles, tantas como cocineros, blogs o libros de cocina. Así que yo no voy a ser menos y voy a poner la mía. Está sacada de este blog, que tiene unas recetas sencillas y muy efectivas, aunque yo le he hecho algunas modificaciones.

Está mal que yo lo diga, pero de verdad que queda un tiramisú esponjoso y riquísimo. Hasta D., que es muy exigente y siempre lo pide en los restaurantes, dice que éste es de los mejores que ha probado, así que ya sólo queda que lo hagáis vosotros y decidáis si tiene razón o si me lo dice por cumplir con sus obligaciones de novio xDDD.

INGREDIENTES:

- 8 huevos
- 400 gr. Queso Filadelfia ó Mascarpone (yo uso Philadelphia, que es más fácil de encontrar)
- 250 gr. Azúcar
- Bizcochos de soletilla (o el que queráis)
- Cacao amargo (para espolvorear por encima)
- Ron
- Café (si no os gusta amargo, con azúcar).


INSTRUCCIONES

Preparamos el "calao" para mojar el bizcocho mezclando el café (si no nos gusta amargo, le ponemos unas cucharadas de azúcar) con el ron (al gusto, aunque tampoco hay que emocionarse eh? xDDD).

Ponemos una capa de bizcochos en el recipiente donde vayamos a poner el tiramisú y con un pincel los vamos mojando con el café con ron hasta que esté bien empapado.

Preparamos la crema del tiramisú: separamos las claras de las yemas. En un recipiente, ponemos las yemas con el azúcar y, con un batidor de varillas, las montamos hasta que estén bien espesas y hayan doblado su tamaño.

Añadimos el queso Philadelphia con cuidado y con movimientos envolventes hasta que quede bien integrado, sin prisa, mezclando poco a poco.

En otro recipiente, montamos las claras con la batidora de varillas hasta que estén bien montadas y las añadimos a la mezcla anterior de las yemas con el queso también con mucho cuidado hasta que queden bien incorporadas. Como veis, el truco de este tiramisú es montar bien las yemas y las claras (cada una con su lado) e ir mezclándolo todo suavemente, para que no se baje y quede una masa esponjosa que esté bien integrada.

Una vez que tenemos la masa, llenamos el recipiente con la base de bizcochos hasta la mitad. Entoncs ponemos otra capa de bizcochos, mojamos con el "calao" con el pincel y volvemos a cubrir con el resto de la masa hasta llenar la fuente.

Por último, espolvoreamos por encima con cacao amargo (yo uso Valor) y lo metemos en el frigo para que coja consistencia. Lo mejor es de un día para otro (si podéis aguantar sin meterle la cuchara antes).


Quizás de presencia no ha quedado muy allá y en las fotos no se termina de apreciar bien, pero os recomiendo que hagáis la pruebas porque es fácil, rápido y el resultado es totalmente espectacular. De hecho, tuve que darme prisa para hacer las fotos porque entre D. y mi hermano raro es que dure de un día para otro! Probadlo y ya me contaréis!